Pasada Javea hay que llegar a la zona residencial de Cumbres del Sol y atravesarla,. Ya estará indicada la cala del Moraig. Antes de bajar a la cala hay un aparcamiento donde dejaremos el vehículo. Está indicada la dirección a tomar;Sendero CV50 a Cala del Llebeig.Son sólo 2Km, pero vale la pena porque las vistas del mar durante toda la ruta son preciosas.
Además he temos tenido la suerte que ha salido un día magnífico, y no hay practicamente nadie. Es una pena la destrucción de la costa de toda esta zona sobresaturada de construcciones. Las montañas están llenas de casas una tras otra. La sensación de somos un virus para el medio ambiente, para el planeta y la naturaleza en lugares como este se ejemplifica. Afortunadamente en esta ruta rapidamente te olvidas de esto porque mientras a un lado está el inmenso mar al otro están los acantilados.
La ruta comienza en la ladera que está encima de la Cala el Moraig, desde donde la podemos ver. Esta cala sí que está habilitada para el baño, con su aparcamiento, chiringuito y servicios varios. Tiene pinta que en verano debe estar a rebosar de gente.
Bordeando los acantilados seguimos el fácil camino. No tiene este primer tramo ninguna dificultad. Va casi en plano y con anchura más que suficiente. A lo largo del camino veremos "cuevas" construidas por antiguos hermitaños al abrigo de las paredes del acantilado. Hay varias y en todas ellas hay paneles explicativos.
Una vez andado el primer kilometro podemos observar nuestro destino ya que observamos como los acantilados hacen un entrante hacia la cala del Llebeig.
Una vez llegamos al lugar de la última imagen el camino se complica un poco dado que desde esta altura debemos bajar hasta la cala. No entraña mucha dificultad pero hay que tener cuidado con el desprendimiento de piedras y resbalarse.
Una vez hemos bajado llegamos a una poste con señales de ruta. Nos indica que a 50m esta la cala, la SL-CV50 por la que hemos bajado y el otro camino desde donde se puede llegar a la cala hasta Portet de Moraira en 50 minutos, 1,5Km.
En esta calita vemos que hay construidas unas casetas, ahora ya abandonadas, que fueron un pequeño reten de la Guardia Civil para evitar contrabando, al estar esta cala completamente aislada.
Nos hemos traido unos bocadillos para comer aqui. Estamos sólos, y bastante aislados,..en todo el tiempo que estaremos sólo aparecerán una pareja de extranjeros y ya cuando nos ibamos un chico con una buena cámara y equipo. La cala parece un campamento pirata perdido en alguna isla,..y sólo se oye el sonido del mar y de las gaviotas.
Comemos y descansamos, exploramos los alrededores y un par de horas más tarde comenzamos la vuelta con lo peor del recorrido, puesto que ahora hay que subir la pendiente que antes fue bajada!. Sin mucho esfuerzo lo logramos y en menos de otra hora hemos llegado al aparcamiento. Decidimos bajar a ver la cala del Moraig. tenemos la suerte que el chiringuito está abierto. No tomamos un par de cocacolas a precio de "oro"! Ojo!. Al lado del aparcamiento hay una entrada a una cueva horadada por el mar con un forma verdaderamente curiosa. Hechamos unas fotos y nos volvemos para Valencia. Ha sido un dia genial!
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